Atención a los equipos del baloncesto profesional de los Estados Unidos que buscarán suplantar a los Celtics de Boston como campeones de la NBA.
Al Horford les tiene un mensaje que hace recordar una canción de Gloria Estefan: No será fácil.
“He venido hablando con los muchachos y nadie está satisfecho. Y eso es lo que quieres. Tenemos una gran oportunidad frente a nosotros y ya nos estamos enfocando de manera individual para prepararnos para la próxima temporada”, dijo el primer dominicano campeón de la liga profesional de baloncesto de los Estados Unidos, en conversación con la sección de Deportes del LISTÍN DIARIO.
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De todas maneras reveló que desde antes de ganar el título, los equipos daban lo mejor que tenían cuando enfrentaban a los Celtics.
“Cuando juegas para los Celtics, para los Lakers, ese tipo de franquicias, los rivales te van a jugar con lo mejor que tienen y con un campeonato más. No espero nada diferente, estamos acostumbrados a eso. Los equipos se van a inspirar contra nosotros”, añadió el tercer pick del sorteo de novatos del 2007 para los Hawks de Atlanta.
Los Celtics se impusieron por 4-1 en la serie final ante los Mavericks de Dallas para su título número 18 de por vida en la liga, rompiendo el empate que tenían con los Lakers para el mayor total en la historia.
Antes habían despachado a Miami (4-1) en la primera ronda de los playoffs de la Conferencia del Este, a los Cavaliers (4-1) en la semifinal y los Pacers de Indiana en la final (4-0).
COMPARACIÓN DE TÍTULOS
Como dos retos diferentes con sus dificultades, definió el veterano jugador el hecho de poder llegar a ser campeón tanto en la NBA como en la NCAA.
“El reto con la NCAA es que es un torneo en el que hay demasiada presión. Puedes tener el mejor equipo, pero ha habido equipos que han dominado todo el año, llegan al torneo y pierden en segunda ronda, semifinal o final siendo el mejor. Hay que jugar lo mejor posible, estar muy compenetrado y entender que no hay mañana”, explicó el cinco veces asistente al Partido de Estrellas.
Horford fue parte de los equipos campeones de la Universidad de Florida, los Gators, en 2006 y 2007, cuando compartió estelaridad con jugadores como Joakim Noah y Corey Brewer, que también estuvieron en la NBA.
“En la NBA juegas series y si pierdes un partido no es el fin del mundo, pero tienes que ganar cuatro partidos contra el mismo equipo, los jugadores saben tus movimientos. Nos estudiamos tanto que se conocen las tendencias. Ahí toca ejecutar, estar más enfocado que nunca para poder sobrellevar eso”, añade el centro y delantero de poder de 6-10 de estatura.
Vio acción en 65 partidos de la serie regular, 33 como titular con promedios de 8.6 puntos, 6.4 rebotes, 2.6 asistencias y 1.0 bloqueos. Su 51 por ciento de campo fue su mejor desde el 2018-19 (53.5), superó el 40 por ciento (41.9) en lances de tres por segunda campaña seguida y tuvo el mejor porcentaje de su carrera de 17 temporadas en lances libres (86.7, de 30-26).