Cuatro policías y nueve presuntos delincuentes murieron en un enfrentamiento armado en las afueras de la ciudad mexicana de Guadalajara (oeste), informaron este jueves las autoridades locales.
El choque se produjo la noche del miércoles en al menos dos viviendas del municipio de El Salto y -según testigos- se prolongó por más de una hora.
Una vez que se revisaron los inmuebles donde se encontraban los presuntos criminales, fueron localizados los cuerpos de nueve personas, entre ellas una mujer, informó fiscalía estatal.
Los cuatro policías fallecidos habían acudido a atender un reporte al número de emergencias.
En medio de la balacera fueron rescatadas dos personas que permanecían secuestradas dentro del inmueble, dijo a periodistas el fiscal de Jalisco, Luis Méndez Ruiz.
El funcionario explicó que policías atendieron una llamada de emergencia que alertaba sobre hombres armados que habían bajado de una camioneta a personas amordazadas en esa casa localizada en la periferia de Guadalajara, capital de Jalisco.
Los agentes que acudieron al lugar fueron recibidos por una mujer quien afirmó que se trataba de un falso reporte, tras lo cual la patrulla fue atacada a tiros.
Méndez detalló que en el mismo lugar, horas antes de la agresión, se realizó un operativo de la Fiscalía especializada en casos de desaparición, pero no confirmó si los rescatados corresponden a las fichas de ese procedimiento de búsqueda.
Tras el tiroteo, fueron detenidas ocho personas y además se incautaron armas largas y munición.
Según datos oficiales, en lo que va de este año diez policías fueron asesinados en Jalisco, uno de los seis estados que concentran 48 % de los homicidios que se comenten en el país, la mayoría ligados al crimen organizado.
Esa región, una de las más prósperas de México, es cuna además del Cártel Jalisco Nueva Generación, el más poderoso grupo narcotraficante del país y responsable de numerosas muertes y desapariciones en la región, de acuerdo con autoridades locales.
Su líder, Nemesio Oseguera, alias “El Mencho”, es uno de los capos más buscados por las autoridades de Estados Unidos, que ofrecen una recompensa de 10 millones de dólares por su captura.
Desde 2006, cuando el gobierno de entonces militarizó el combate antidrogas, México acumula más de 340,000 asesinatos.