Las autoridades ucranianas reivindicaron el domingo la toma del pueblo de Klishchiivka, una localidad de importancia táctica cerca de la ciudad de Bajmut (este), en un conflicto que Estados Unidos y la OTAN prevén largo.
“Klishchiivka fue limpiada de rusos”, dijo Oleksander Syrskyi, comandante de las fuerzas terrestres del ejército ucraniano, en las redes sociales.
Esta localidad, con apenas unos cientos de habitantes antes de la invasión de Rusia, fue tomada por las fuerzas de Moscú en enero.
En su tradicional intervención vespertina, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, elogió a los soldados que luchan contra los rusos cerca de Bajmut y destacó a los que habían retomado Klishchiivka. “¡Bien hecho!”, dijo.
El presidente, que el jueves viajará por segunda vez a Washington desde el inicio de la guerra, afirmó que se están “preparando nuevas soluciones de defensa para Ucrania”.
“La defensa aérea y la artillería son la prioridad”, señaló sin dar más detalles.
El pasado viernes, las autoridades ucranianas anunciaron la captura de otra localidad cercana a Bajmut, Andriivka, aunque el ejército ruso lo desmintió el domingo.
Ilya Yevlakh, portavoz de las tropas ucranianas en el frente oriental, dijo que la toma de Klishchiivka podría ayudarles a rodear Bajmut.
“Ahora hemos ganado un terreno de preparación, que en el futuro nos permitirá continuar desarrollando acciones ofensivas y liberar nuestra tierra de los ocupantes”, declaró en la televisión nacional.
“Es sobre todo por el control de las rutas logísticas que permiten abastecer Bajmut. También la exposición de los blancos, en particular al sur, que nos permitirá avanzar más eficazmente en las líneas enemigas”, agregó.
UNA GUERRA LARGA
Las fuerzas de Kiev intentan cortar las rutas logísticas del ejército ruso en el marco de la contraofensiva lanzada en junio para recuperar los territorios ocupados en el este y el sur.
El jefe del Estado Mayor estadounidense, el general Mark Milley, estimó en una entrevista difundida el domingo que esta contraofensiva “no ha fracasado”, pero que el camino hacia la victoria es todavía muy largo.
“Esta ofensiva, aunque más lenta de lo esperado, se mantuvo constante” y los ucranianos todavía tienen “una fuerza de ataque significativa”, sostuvo.
Admitió, sin embargo, que “llevará mucho tiempo” lograr el objetivo del presidente Zelenski de “expulsar a todos los rusos” del país.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, expuso una opinión similar en otra entrevista. “La mayoría de guerras duran más de lo que se preveía cuando empezaron”, dijo al grupo de medios alemán Funke.
“En consecuencia, tenemos que prepararnos para una guerra larga en Ucrania“, añadió.
Por segunda vez desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, Zelenski acude el jueves a la Casa Blanca para hablar con el presidente Joe Biden sobre el respaldo de Washington a Kiev.
El desplazamiento coincide con un debate en el Congreso estadounidense de un nuevo paquete de 24.000 millones de dólares de ayuda militar para la antigua república soviética.
Aprovechando la visita, Zelenski acudirá al Capitolio para reunirse con los líderes de los dos partidos, demócratas y republicanos.
De parte de Rusia, su Ministerio de Defensa anunció que había derribado el domingo varios drones ucranianos en la península de Crimea, cerca de Moscú y en las regiones fronterizas de Bélgorod y Vorónezh.
También reivindicó un ataque con misiles contra una fábrica de reparación de tanques en la ciudad ucraniana de Járkov.