En un intento por encontrar una solución al conflicto generado por la reubicación de aproximadamente 1,200 familias en la provincia Sánchez Ramírez, inició esta mañana el diálogo entre los afectados y representantes de la empresa minera Barrick Pueblo Viejo.
Los moradores de comunidades como Zambrana Arriba, Arroyo Vuelta, Laja, Las Tres Boca, El Ligo, El Rayo y El Naranjo han denunciado un presunto intento de desalojo forzoso de sus terrenos por parte de la empresa minera.
Este conflicto ha escalado, resultando en enfrentamientos violentos en los que varias personas, incluidos dos sacerdotes, resultaron heridas en la madrugada del pasado miércoles.
El incidente se produjo cuando la empresa minera, acompañada por miembros del Ejército Dominicano llegó a la zona, lo que provocó una serie de enfrentamientos con los residentes locales. Los afectados buscan que sus derechos sean respetados y que se encuentre una solución pacífica a esta situación.
La mediación de autoridades eclesiásticas y gubernamentales busca establecer un puente de diálogo y evitar que el conflicto se agrave aún más.
La reunión de este lunes se llevó a cabo en el arzobispado de La Vega, mediada por el arzobispo Thomas Morel DiPlan, el presidente del Senado, Ricardo de Los Santos; el Ministro de Energía y Minas, Joel Santos; y el Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa.