Ramón Cruz Benzán
Santo Domingo, RD
La exigencia de mejores condiciones frente al hacinamiento, las requisas, las constantes riñas entre bandas y el traslado de reos, han provocado múltiples motines en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Najayo.
El último motín ocurrió el pasado sábado en el recinto penitenciario, donde seis reclusos resultaron heridos durante el desarrollo de una requisa de las autoridades del plantel.
Durante la inspección, los oficiales a cargó ocuparon un teléfono móvil, seis objetos cortopunzantes y seis porciones de presunta cocaína.
Los agentes de vigilancia tuvieron que movilizarse ante la acción de los privados de libertad de dos módulos que provocaron un alboroto para resistirse a la revisión realizada.
A pesar de las distintas operaciones que han desarrollado las autoridades a lo largo de los años para la “toma de control”, los motines han ido ganando terreno dejando a su paso decenas de heridos, muertos, fugas e intentos de fugas de los reos.
La inseguridad, la sobrepoblación, la venta de drogas y otros males continúan siendo la norma en algunas cárceles dominicanas.
El interior de las cárceles del país sigue siendo un mundo paralelo, donde la violencia que ejercen bandas e individuos se refleja en motines. Pero también en las revueltas que dejan como resultados muertos y heridos.
El Sistema Penitenciario del país cuenta con 41 cárceles, 22 en el nuevo modelo. Además, un total de 12 en control del Ejército dominicano y 7 en poder de la Policía Nacional.
Sin embargo, cada una de esas modalidades muestra sus falencias, como lo es la cárcel de Najayo.
El 6 de octubre del 2022, se reportó que siete reclusos resultaron heridos tras producirse una trifulca en la cárcel de Najayo, a poco días de que las autoridades ocupan drogas, armas blancas, teléfonos móviles y otros objetos ilegales, durante una intervención.
El 20 de enero del 2022, fue reportado un motín en la cárcel, el cual dejó como saldo varios agentes penitenciarios y privados de libertad heridos, del incidente fueron señalados como responsables Wandar Amaury Almonte (Gaveta) y Aramis Martínez Pérez.
El 6 de septiembre del 2021, un recluso resultó herido en la cárcel de Najayo, tras producirse una riña en cuatro internos, donde los agentes de vigilancia tuvieron que intervenir.
El 2 de febrero del 2018, cuatro privados de libertad resultaron heridos durante una riña entre presos, escenificada en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Najayo.
El 24 de octubre del 2014, cuatro reclusos murieron en ese plantel, durante un motín en el que cuatro agentes de seguridad resultaron heridos, dos de ellos de gravedad.
