El presidente emérito del Tribunal Constitucional, Milton Ray Guevara, expresó ayer su parecer sobre la propuesta de reforma constitucional del presidente Luis Abinader, que tiene como eje central cuatro puntos principales.
Aunque con varios desacuerdos en lo que respecta a algunos de los planteamientos del proyecto depositado por el Poder Ejecutivo en el Senado de la República, Ray Guevara valoró de manera positiva la intención de petrificar colocando una cláusula en el artículo 124 de la Carta Magna para proteger las reglas de elección y permanencia en el puesto del presidente ante futuras modificaciones.
“Debemos reconocer el compromiso que tiene el presidente con crear los candados necesario para que en República Dominicana el tema de la reelección presidencial deje de ser traumática. Yo apoyo esa iniciativa”, resaltó.
El presidente Abinader propone alterar el artículo 171 que versa sobre la forma de elección que tendrá como requisito el especialista en derecho colocado en la dirección de la Procuraduría General de la República (PGR) para garantizar el fortalecimiento de su independencia política.
Con relación a esto, Ray Guevara coincidió con la visión del gobernante. No obstante, indicó que respalda los sectores que prefieren un periodo de cuatro años de inamovilidad del titular de la PGR, diferente a los dos establecidos en la pieza legislativa.
Lo mismo sucedió con los esfuerzos del primer mandatario para establecer como ente seleccionador del procurador al Consejo Nacional de la Magistratura, que deberá confirmar la opción presentada, al comienzo del cuatrienio gubernamental, por el presidente de turno.
Para el jurista constitucionalista, el juez que ocupa el puesto de procurador debe ser designado mediante un decreto por el Gobierno, para luego ser ratificado por el Poder Legislativo, específicamente el Senado. Esto, debido a que es un espacio de prima la pluralidad que representan a las distintas organizaciones políticas del sistema dominicano.
“Comparto el criterio de fortalecer la independencia del procurador, a través de un mecanismo que garantice su inamovilidad, que aspiro que sea por cuatro años y que además, sea el presidente de la República quien designe al procurador y el mismo sea ratificado por un órgano plural como es el Senado donde están representados las distintas sensibilidades políticas partidarias”, aclaró.
Acápites diferidos
Por otro lado, el particular, el cual declara la necesidad ante el Congreso Nacional de realizar una reforma a la Constitución, persigue alcanzar, mediante la modificación del artículo 209, la unificación de las elecciones electorales para reducir los costos que representan estos procesos.
No obstante, el primer presidente del TC aseguró que lo mejor para el desarrollo de la municipalidad en el país es dividir los comicios presidenciales, congresuales y municipales con un intervalo de dos años. Ya que la adherencia de los torneos electorales podría generar un desorden en el cómputo de las actas realizado por la Junta Central Electoral (JCE). Al igual que podría desorientar a los ciudadanos al momento de utilizar las boletas electorales, debido a la profundidad que representan las circunscripciones en las distintas provincias.
“No creo que el país deba juntar las elecciones presidenciales, legislativas y municipales. La vida municipal es la primera escuela de democracia de un país. Lo mejor para el desarrollo municipal es que las elecciones sean cada dos años con las limitaciones del uso de recursos que aconseje la ley y los organismos electorales”, manifestó.
Ray Guevara recordó que Juan Pablo Duarte, uno de los principales próceres de la independencia dominicana, fue de los primeros pensadores en catalogar la municipalidad como el “cuarto poder del Estado”.
“El poder municipal es una aspiración permanente de la República Dominicana desde que Juan Pablo Duarte señaló que este era uno de los cuatro poderes del Estado en su proyecto de constitución de la República”, destacó.
Reducción cantidad de diputados
Por último, lamentó el proyecto de transformación a la norma suprema afecté también la cantidad de integrantes que tiene la Cámara de Diputados, reduciendo la matrícula de 190 a 137 diputados.
“El número que está ahora fue producto de un estudio de más de dos años que se hizo con relación a la estructuración de la Cámara de Diputados, los diputados son los representantes directos de los electores de los habitantes en los territorios”, declaró.
Deploró, además, que la disminución esté direccionada a los representantes provinciales para aumentar la cantidad de diputados nacionales a 20, teniendo en cuenta que estos no son electos directamente por el voto popular, sino colocados por las organizaciones políticas.
“Yo tampoco estoy de acuerdo con esa disminución. Que ahora se pretenda quitar diputados que representan las provincias, para poner más diputados nacionales, cuyo interés es de los partidos, creo que eso contradice todo lo que debe ser colocar al ciudadano en primer lugar de las preocupaciones esenciales de los poderes públicos”, subrayó.