Cuando termine el descanso por el Juego de Estrellas, iniciará el último jalón.
No queda mucho tiempo en la temporada de la NBA. El Juego de Estrellas se llevó a cabo cuando algunos equipos habían disputado 60 juegos, más allá de la mitad de una temporada de 82 partidos. Será un sprint hacia el final y los Nets de Brooklyn y Lakers de Los Ángeles necesitan probar que tienen lo necesario.
Los Nets podrían contar con Kevin Durant y Ben Simmons en la duela muy pronto. Pero los Lakers podrían no tener a Anthony Davis hasta dentro de un mes por una lesión en el pie, con lo que toda la presión recaerá en LeBron James.
Con lesiones e inconsistencias, ninguno de estos equipos sabe con seguridad qué esperar en la postemporada. Ambos han tenido actuaciones por debajo de las expectativas. Los Lakers tienen foja de 27-31. Pero una mala racha en invierno puede olvidarse fácilmente si se calientan en la primavera como le ocurrió a los Bucks el año pasado.
“Como equipo, empezamos a jugar mejor hacia el final”, reconoció Giannis Antetokounmpo. “Quizá lo podremos volver a hacer. ¿Quién sabe? Estamos en un buen momento”.
Los Bucks se ubican en el quinto puesto, pero eso significa poco en una atestada Conferencia Este. Miami y Chicago están empatados en la cima y de manera sorpresiva Cleveland y Filadelfia se ubican 2 juegos y medio atrás. Milwaukee se encuentra un poco atrás.
La brecha es más amplia en el Oeste y Phoenix tiene ventaja de 6 juegos y medio sobre Golden State tras ganar un récord de siete duelos consecutivos para una foja de 48-10.
Pero incluso esos equipos están preocupados. Phoenix tendrá que prepararse para una larga ausencia de Chris Paul y Golden State sigue sin contar con Draymond Green por una lesión de espalda.
Las lesiones son parte de cada temporada, pero en esta campaña se sumaron a los problemas por el coronavirus.
Aún hay tiempo para escalar, pero no mucho.
Algunas cosas para observar hacia el final.