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Familiares de matador en Capotillo temen a represalias de parientes de víctima

Una intervención militar que incluyó más de 300 miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional tuvo lugar durante el fin de semana en la calle 42 de Capotillo. De acuerdo con las autoridades, la intención que primó durante este operativo, que dio lugar a un seguimiento constante, fue la de proteger y salvaguardar la vida de quienes residen en el área.

No obstante, ahora los familiares de “Brisita”, un presunto delincuente que el domingo pasado habría acabado con la vida de “Oscar Soco”, supuesto jefe en la organización criminal a la que servía, se sienten más desprotegidos que nunca ante el asedio de “Los Socos”, quienes buscan “hacerlos pagar” por el crimen del joven con quien aseguran no tener contacto hace más de seis meses.

“Eso es cosa de delincuentes, mi familia, mis hermanos y yo estábamos acostados en nuestra cama cuando pasó eso (el asesinato de Oscar Soco) y ellos lo saben (la familia Soco), ellos lo saben quién fue que le mato a ellos su hermano; y aún así, fueron y pagaron con nosotros, con familias inocentes, donde hay más de siete niños y donde hay una niña con condición especial que se estuvo al morir con ese acontecimiento”, manifestó uno de los familiares.

Según lo que denunciaron, a pesar de poner la querella ante la Policía Nacional, no les han brindado ni protección ni acompañamiento, todo lo contrario, han sido obligados a permanecer escondidos lejos de sus hogares ante el acecho de que son víctimas desde la madrugada en que ocurrió el suceso.

“El vocero de la Policía dijo que eso era problema de bandas, eso no es problema de bandas, eso es problema de familia, porque nosotros estamos pagando sin tener nada que ver. Ese muchacho hizo eso (su pariente), sí, él es un delincuente, pero nosotros no tenemos que ver”, volvió a repetir otro pariente, sin negar que el conocido como Brisita se había salido del seno familiar e incursionado en la vida ilícita, agregando que a raíz de eso fue dejado de lado.

“No son ninguno de los dos serios, ellos eran delincuentes, uno era el que patrocina el robo y el otro era el que robaba”, señalaron con seguridad de los alias Brisita y Oscar Soco.

Presos de la angustia

La presión que los conocidos como Socos de Capotillo han ejercido sobre ellos es tal, que la misma madrugada del domingo 28, cuando Oscar Soco perdió la vida de dos disparos, fueron sorprendidos en sus viviendas por ellos, a quienes señalan como poseedores de un red delictiva que se dedica al lavado de activos, venta de drogas y atracos organizados.

El grupo llegó hasta las casas de quienes se identifican como primos del matador, y los sacaron a punta de pistolas, saqueando sus pertenencias y dañando todo lo que no pudieron llevarse en el proceso.

“Nosotros estábamos en nuestra vivienda, a la cual ahora nosotros no podemos entrar, nos la desbarataron, nos robaron todo. Ese mismo domingo (el día de lo ocurrido) a partir de las tres de la mañana, tuvimos que salir corriendo con nuestros niños”, contó una de las personas afectadas.

Asimismo, de acuerdo con su relato, luego de lo ocurrido, el lunes después fueron hasta su propiedad, pero fueron despachados a tiros por Los Socos que se habían apropiado de los lugares, y en defensa respondieron de la misma forma, lo que dio lugar a la interpretación de la Policía Nacional, de que el hecho era enfrentamiento entre bandas.

“Nos robaron, rompieron nuestras pertenencias y cuando mi marido y sus hermanos fueron a ver la casa, ellos (Los Socos) los sacaron a tiros, entonces ellos (su esposo y parientes) lo que hicieron fue que se defendieron de los ataques; y quieren ponerlo como que es una banda, que son unos ladrones y las cosas no son así. Nosotros no tenemos nada que ver con eso”, relató un miembro de la familia al Listín Diario.

Además, mencionó que al hacer la denuncia la Policía envió dos patrullas hacia sus viviendas, que son unas cuatro que están juntas en el mismo espacio, y los agentes se negaron a irrumpir porque “esas mujeres son muy frescas”, dígase las que forman parte de la red.

“Nosotros fuimos a la Policía, pusimos nuestra querella y nos mandaron para la fiscalía de aquí de Capotillo y aquí nos pusieron como dos unidades de topos para ir a ver la casa y nos dijeron que no, que ellos no pueden entrar ahí, que esas mujeres son frescas y hasta el sol de hoy estamos sin protección”, relató uno de los afectados.

Aunado a esto, afirmaron que los allegados al fallecido son conocedores de que ellos sabiendo que “fue un solo que lo mató”, y que el par se encontraba en disputa, a lo que agregaron que el difunto sabía más de su primo que ellos mismos, “porque no tenían ningún tipo de comunicación con ese muchacho (Brisita)”.

“Los inocentes no pueden pagar como estamos pagando, nuestros niños están pagando porque no tienen un techo donde dormir, ni siquiera tienen comida y son algunos vecinos que nos ayudan”, reclamaron.

Los Socos

De acuerdo a lo que refirieron, los jefes de la organización de sicariato y lavado de activos son identificados popularmente como Maicol Soco y Maira Soco; de ellos se derivan Carlos Leder, Jarolin Soco, Memo Soco, Tania Soco, Conga Soco, Minina Soco, Papo Soco, Manuelsito Soco, Cheo Soco y el fallecido Oscar Soco. 

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