EUROPA PRESS Madrid, España
El secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha anunciado este miércoles un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania valorado en 150 millones de dólares (unos 139 millones de euros) y que incluye armas, municiones y otro tipo de equipamiento destinado a “fortalecer las defensas aéreas de Ucrania frente a los ataques rusos y a reforzar las capacidades ucranianas en todo el frente”.
“Este es el séptimo paquete de ayuda a la seguridad que el presidente (de Estados Unidos, Joe Biden) ha autorizado para ayudar a Ucrania desde la firma del suplemento de seguridad nacional hace dos meses. Enviaremos esta nueva ayuda lo antes posible para reforzar la defensa de Ucrania, de su territorio y de su pueblo. Como ha dejado claro el presidente Biden, Estados Unidos y la coalición internacional que hemos formado seguirán apoyando a Ucrania”, ha expresado Blinken.
Washington enviará así misiles para los sistemas de defensa aérea Hawk, munición para lanzacohetes HIMARS, proyectiles de artillería de 155 y de 105 milímetros, proyectiles de mortero de 81 milímetros, misiles lanzados por tubo, de seguimiento óptico y guiados por cable (TOW), sistemas antiblindaje Javelin y AT-4, municiones y granadas para armas ligeras, equipos y municiones de demolición, vehículos tácticos para remolcar y transportar equipos, sistemas tácticos de navegación aérea y equipos de apoyo a aeronaves, dispositivos de visión nocturna, y piezas de repuesto, mantenimiento y otros equipos auxiliares y de campo.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha agradecido a Biden y al Congreso estadounidense por el envío de equipos “vitales” para fortalecer las capacidades de sus tropas en el frente de batalla. “Contamos con la ayuda continuada de Estados Unidos para reforzar la defensa de Ucrania y permitirnos contrarrestar eficazmente la agresión rusa y proteger a nuestro pueblo contra el terror ruso”, ha indicado a través de su perfil en la red social X.
Por su parte, el embajador de Rusia en Washington, Anatoli Antonov, ha asegurado que este nuevo envío “alberga sueños ilusorios de una victoria” y supone un nuevo paso de Estados Unidos “hacia la guerra”, según un comunicado publicado en el canal de Telegram de la Embajada rusa en Washington.
“Impulsar al agonizante régimen de Zelenski con armas mortales es algo inútil. En esencia, esto es animar a los terroristas de Kiev a cometer nuevos crímenes. Es obvio que las nuevas armas estadounidenses no reducirán la intensidad de nuestra lucha por la liberación de Ucrania. Sólo provocarán nuevas bajas entre la población civil, incluidas mujeres y niños”, ha expresado Antonov ante los medios de comunicación.
Además, ha asegurado que la Administración Biden pretende mostrar “firmeza” ante la próxima cumbre de la OTAN sin “pensar en las consecuencias globales de la catástrofe que se avecina” debido a su “miope y peligrosa política”. En ese sentido, ha manifestado que los estadounidenses “no ven ni comprenden la verdadera situación”, que les lleva a “arrastrar hasta el fondo” a la economía del “todopoderoso Occidente”.
Este anuncio ha llegado poco después de una llamada entre Blinken y su homólogo ucraniano, Dimitro Kuleba, en la que precisamente han hablado sobre las formas de reforzar la defensa aérea ucraniana frente a los ataques rusos contra su infraestructura energética y civil, a la que pretenden seguir reforzando de cara a la llegada del invierno. Además, el secretario de Estado ha reconocido el compromiso de Ucrania con las reformas destinadas a lograr una “mayor integración euroatlántica”.