Desde que el presidente Luis Abinader modificó la Constitución para petrificar su decisión de no volver a aspirar por un tercer periodo consecutivo al frente del Poder Ejecutivo, dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM) comenzaron a surgir múltiples personas con aspiraciones de ocupar la candidatura presidencial del oficialismo en mayo del 2028.
Las aspiraciones se mostraron al punto tal que incluso antes de que Abinader iniciara oficialmente su segundo mandato, ya estructuras comunicacionales, spots publicitarios y sondeos habían comenzado a inundar las redes sociales, lo que llevó al jefe de Estado a sostener un encuentro privado con estos aspirantes, en búsqueda de que se enfocaran en su rol en la nueva gestión de Gobierno.
Sin embargo, a pesar de ese señalamiento del mandatario y los múltiples llamados realizados desde las autoridades del PRM, incluyendo del presidente del partido, José Ignacio Paliza, la carrera ya había empezado.
En primera instancia los contendores eran la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía; el ministro de Turismo, David Collado; el coordinador del Gabinete de Políticas Sociales del Gobierno, Francisco Antonio (Tony) Peña Guaba; el director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), Wellington Arnaud y el director General de Aduanas, Eduardo “Yayo” Sanz Lovatón.
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Con unas declaraciones de que soñaba caminar las escalinatas del Palacio Nacional con la banda presidencial, la vicepresidenta Raquel Peña también se incluiría en la carrera mientras que el presidente del Instituto Dominicano de Telecomunicaciones (Indotel), Guido Gómez Mazara tampoco descartaría presentar sus aspiraciones.
A pesar de que la atención política se ha concentrado en el diálogo entre Abinader y los expresidentes Danilo Medina, Leonel Fernández e Hipólito Mejía y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ha hecho más ruido con relación a su determinación a la elección temprana de un candidato presidencial, la carrera a destiempo no se ha detenido dentro del partido de Gobierno.
Muestra de ello fue lo vivido el pasado fin de semana cuando Collado asistió a varios barrios de la capital dominicana bajo la premisa de entregar regalos y cajas con motivo a la celebración del Día de las Madres, mientras que Lovatón formalizó su Dirección Nacional de Comunicaciones de la Juventud bajo el mote de “Ya yo estoy Ready”.
El equipo de la alcaldesa del Distrito Nacional tampoco se quedó atrás y a través de unas declaraciones de quien ha llevado la voz cantante en la vocería de sus aspiraciones, Fellito Suberví, director de Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd), manifestó que a pesar de que todos los aspirantes del PRM son “buenos, la mejor es Carolina Mejía”.
Del lado de la vicepresidenta, se enviaron varios videos de la misma destacando su presencia en el Vaticano en representación del Estado Dominicano en la primera misa oficial del papa León IV; mientras que Peña Guaba y Arnaud han aprovechado su posición dentro del tren gubernamental para seguir visitando provincias y promover su obra y aspiraciones.
¿Unidos o no?
La gran cantidad de aspiraciones presentadas ha generado una preocupación latente de que ese proceso interno cause una división dentro del PRM, pero tanto el mandatario como las altas autoridades del partido han garantizado unidad dentro del mismo.
Con Lovatón reuniéndose con varios de sus posibles contrincantes como Collado y Carolina Mejía, la señal de unidad se ha ido gestando para palestra pública; sin embargo, con los dirigentes medios del partido, personas en cargos electivos y en el tren gubernamental comenzando a identificarse por cada uno de los aspirantes mantienen abiertas las posibilidades de una división.
