A pocas horas de darse la marcha patriótica y pacífica convocada para mañana domingo por la Antigua Orden Dominicana, el ambiente sigue tenso, pero sin alteraciones y cumpliéndose la cotidianidad en el gueto con apoyo a la propuesta de civismo editorializada por este diario.
En la medida en que se acerca la “hora cero” de la convocatoria, la expectativa y tensión crecen, sin que se hayan producido incidentes que lamentar, aunque si amagos de algunos residentes en el lugar, de evitar el escarceo y grabaciones de periodistas y youtubers.
Periodistas y manejadores de plataformas digitales se han apostado en la entrada del lugar, siguiendo juntos a los medios tradicionales el ambiente y minuto a minuto las incidencias en el Hoyo de Friusa, convertido en centro de atención del país y el extranjero.
La situación hasta anoche era normal en el Hoyo de Friusa, con una vigilancia policiaco-militar reforzada y con unidades antimotines y equipos especiales, para prevenir cualquier eventualidad.
El llamado realizado en el editorial del pasado jueves del LISTÍN DIARIO, caló entre religiosos, comunitarios y comunicadores que se identificaron con la propuesta de apoyar la marcha, pero con civismo.
Al respecto el veterano periodista Víctor Ramón Rosa, pionero de la radio en la zona, opinó que la pieza “no tiene desperdicios” al describir, no solo la realidad, sino recoger el sentimiento patrio y a la vez llamar a la prudencia, sin que la emoción, se desborde.
En esos mismos términos se expresó el sacerdote Antonio Villavicencio, párroco de la iglesia Juan Pablo II Ejecutivo de Altos de Friusa, quien consideró que no habrá violencia y que la marcha se llevará a cabo sin mayores alteraciones, tal como refiere el editorial del decano de la prensa dominicana
“Yo este viernes tengo una actividad y puedo entrar y salir, sin problemas. Lo que hay que hacer es regularizar a los hermanos haitianos que residen allí, dónde tenemos una parroquia y no hemos sido objeto de robos, por lo que no habrá violencia, esa gente no reaccionará, son trabajadores de la zona”, dijo el sacerdote.
Al llamado la paz por la “marcha patriótica” en El Hoyo de Friusa se unió la Fundación Zile, cuyos directivos llamaron al civismo y a la calma.
El obispo de la Diócesis de La Altagracia, monseñor Jesús Castro Marte, también ha elevado su voz en torno a la convocatoria, en el mismo tono que la posición editorial de este diario.
Esta semana se informó sobre la presencia de la Dirección General de Migración, que detuvo a algo más de doscientas personas en un operativo de interdicción en el lugar. Sin embargo, ayer no se observó movimiento en ese sentido, a pesar de la presencia militar.
La fundación manifestó que los inmigrantes, en cualquier parte del mundo, no son responsables de las tragedias o factores que los obligan a buscar mejores oportunidades en otras tierras.
“En lugar de fomentar la división, debemos canalizar nuestras inquietudes adecuadamente para abordar, junto con la comunidad internacional, las raíces del problema y no enfocarnos únicamente en los individuos”, precisó.
Editorial del LISTÍN
La opinión del LISTÍN indicó que “El derecho a la manifestación pacífica está consagrado en la Constitución y, como tal, merece ser respetado y protegido”.
En ese espíritu, diversas organizaciones civiles y populares han convocado para este domingo 30 una marcha patriótica en el sector de Friusa, Bávaro, donde residen miles de inmigrantes haitianos, en su mayoría en situación irregular.
Frente a este llamado a marchar por parte de sectores nacionalistas, el presidente Luis Abinader y la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, han reafirmado su compromiso con el Estado de derecho”.
El editorial de este diario apunto que: “Y han dado garantías de que los ciudadanos puedan ejercer su derecho a la protesta dentro de los cauces legales y sin recurrir a la violencia”.
La ministra Raful lo expresó con claridad: “Friusa es territorio dominicano y se imponen las leyes dominicanas”, una declaración que envía un mensaje inequívoco, tanto a los manifestantes como a la comunidad internacional, sobre la soberanía y la vigencia de la ley en todo el territorio nacional.
Sus palabras también reflejan el delicado equilibrio que el gobierno busca mantener: hacer cumplir las leyes migratorias con operativos puntuales –como los realizados recientemente en la zona–, sin renunciar a los principios democráticos que garantizan la libre expresión ciudadana”. , lo que ha tenido apoyo de sectores religiosos, turístico, comunitarios y empresarios que tienen inversiones en el litoral Bávaro -Punta Cana.