Paolo Banchero sabe todo sobre el haka, el baile tradicional que fue realizado por los jugadores de Nueva Zelanda antes del partido del sábado como el tradicional grito de guerra para mostrar orgullo nacional y servir como un desafío a los oponentes.

Aceptó ese desafío.

Banchero anotó 21 puntos desde el banquillo en su primer partido de la Copa del Mundo, Anthony Edwards agregó 14 y Estados Unidos se sacudió un déficit inicial de 10 puntos en el camino a vencer a Nueva Zelanda 99-72 en el primer partido del torneo para ambos equipos.

Jaren Jackson Jr. y Austin Reaves anotaron 12 cada uno para los estadounidenses, que permanecieron invictos en seis juegos este verano, los primeros cinco de ellos exhibiciones. Este juego fue el primero que contó para los estadounidenses, que intentan ganar la Copa del Mundo por sexta vez y borrar el recuerdo de terminar séptimos en el torneo más grande de FIBA hace cuatro años en China.

No fue fácil para los favoritos antes del torneo: su ventaja era de solo 12 con 2:01 para el final del tercero antes de que Banchero anotara 3 puntos en posesiones consecutivas para darle a Estados Unidos su mayor ventaja de la noche hasta ese momento, y los estadounidenses mantuvieron el control desde allí.

“Y su defensa”, dijo Edwards sobre Banchero. “Creo que su defensa energizó su ofensiva”.

Los jugadores de Nueva Zelanda realizaron ese haka previo al juego, el espectáculo de baile, pisotón y cánticos realizado por toda la lista de 12 hombres, con los jugadores estadounidenses parados en el otro extremo y mirando en silencio.

El haka funcionó; Nueva Zelanda tomó una rápida ventaja de 14-4. Una carrera de 12-2 de los Estados Unidos empató el juego, los 3 puntos de Tyrese Haliburton con 6:58 restantes en la primera mitad pusieron a los estadounidenses arriba para siempre, la ventaja era de 45-36 en la mitad y los ganadores siguieron alejándose.

“Salieron a correr, pero sin nervios”, dijo Edwards. “Hacemos esto. Pusimos el trabajo”.

El haka llevó a Banchero de vuelta a sus días de escuela secundaria. Jugando al fútbol en un equipo con isleños del Pacífico, Banchero ha hecho el haka. Él conoce su significado, conoce su intención, y tal vez lo llevó a su mejor juego en lo que va del verano.

“Fue bueno poder ver de cerca”, dijo Banchero. “De hecho, lo disfruté”.

Estados Unidos podría asegurar un lugar en la segunda ronda tan pronto como el lunes, cuando se enfrente a Grecia (1-0) en una revancha de un partido de exhibición en Abu Dhabi a principios de este mes. Los estadounidenses ganaron ese juego 108-86, con ambos equipos reteniendo algunas cosas sabiendo que jugarían por apuestas más altas en Manila.