El primer ministro Haitiano Ariel Henry formuló ayer un llamamiento a la “calma y la reconciliación” de su país, agobiado por una profunda crisis económica y social que ha derivado en violentos enfrentamientos diarios, cuyo fondo sigue siendo la lucha por el poder político en ese país.

Mientras tanto, en Francia, el Ministerio de Europa y Asuntos Exteriores mostró su preocupación por la escalada de violencia en ese país e instó a un diálogo “sincero” para “volver al orden constitucional”.

También, en Nueva York, el secretario general de las  Naciones Unidas, Antonio Guterres, expresó su “profunda preocupación” por la escalada de la crisis.

El mensaje Ariel Henry tuvo ocasión al cumplirse ayer, lunes, el 264 aniversario del nacimiento de Jean-Jacques Dessalines,  el líder de la revolución haitiana que proclamó la independencia del país el 1 de enero de 1804 y se convirtió en su primer gobernante.

Henry definió a Dessalines como “un héroe inmortal que cambió el curso de la historia de la raza negra”.

“Aprovecho este día para lanzar un solemne llamamiento a la calma y la reconciliación de nuestra nación, hoy dividida”, dijo Henry, pidiendo dejar de lado “nuestras diferencias para que juntos, de la mano, podamos cambiar nuestro destino”.

Aun siendo Dessalines padre de la patria de los haitianos, el día de ayer trascurrió prácticamente inadvertido. Las gestiones de protestas parecen haber empañado la fecha, de la que hubo poca referencia.

A tal punto impactó esto que, tras conocerse de la mención hecha por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el portal Haití 24 se lamentó escribiendo que “si las autoridades venezolanas no dejaron pasar el día en silencio, las haitianas no tomaron prácticamente ninguna iniciativa para conmemorar esta fecha”.

Mientras tanto, desde Francia, el Ministerio de Europa y Asuntos Exteriores manifestó su preocupación por la escalada de violencia en Haití e instó a un diálogo sincero para “volver al orden constitucional”.

“Francia está particularmente preocupada por la escalada de violencia en Haití y condena enérgicamente los ataques contra las personas, los bloqueos de carreteras y los saqueos cometidos en los últimos días en Port-au-Prince y en todo el país”, indica el Ministerio francés.

Instó a todos los actores políticos haitianos a encontrar, a través de diálogos sinceros, un “acuerdo que permita establecer consensos sobre la organización de elecciones democráticas para el retorno al orden constitucional”.

“Francia desea reafirmar su solidaridad con el pueblo haitiano, víctima del alarmante deterioro del contexto humanitario, político y de seguridad en el país”, agrega, indicando que continúa trabajando “para movilizar a la comunidad internacional para brindar a los haitianos toda la asistencia necesaria”.    

Guterres y la ONU

Mientras, en Nueva York, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, expresó su “profunda preocupación” por la situación actual en Haití, donde los disturbios civiles han paralizado a ese país.

Durante una entrevista con Radio France Internationale y France 24, publicadas por el diario Miami Herald, Guterres dijo estar preocupado por la seguridad de todos los haitianos, incluidos los más vulnerables, y llamó a la “calma y la máxima moderación” de todos los actores.

Asimismo, instó a todas las partes interesadas a tomar medidas inmediatas para reducir la situación, evitar la violencia y permitir que la Policía Nacional de Haití cumpla con su mandato de proteger a la población.

Guterres cree que la actividad de las pandillas no es un movimiento político, aunque reconoce que en este se infiltran actores políticos y económicos.

A fuerza de machetes

Haitianos invadieron una oficina de la  ONG Acted, en Rochasse, cargando con colchones, neveras, televisores, y cinco motocicletas.

Los locales de esta y otras entidades extranjeras también fueron atacadas y robadas. Encapuchados, machetes en manos, causaron estragos en ciudad Leogane  e incendiaron los locales de la sucursal del banco Unibank, llevándose muebles, baterías, computadoras, televisores a armas de fuego.

Detalles

Paros y bloqueos.

Ayer hubo paro de actividades en la capital haitiana. Muchas calles seguían bloqueadas y las instituciones públicas y  privadas limitaron sus operaciones. 

Pasada una semana desde el inicio de  las protestas contra la medida del Gobierno de subir el precio de los combustibles, no hay señales de que Haití pueda tener un respiro, debido a la agitacion.

En  Delmas, las instituciones públicas y muchas privadas cerraron sus puertas. Los tramos de carretera estaban bloqueados. En igual situación está la vía a Nazón, con un bloqueo total a la circulación de vehículos.

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