Tras casi dos años en que una lesión en la rodilla lo aparto del escenario, Ronny Mauricio está de regreso al gran espectáculo.

La misma se había producido en diciembre del 2023, de manera aparatosa, jugando con el Licey en el béisbol dominicano, en un corrido de bases intentaba retornar a la inicial y en el proceso se cayó de manera brusca, hecho que le hizo abandonar las acciones y momentáneamente detener una carrera en que ya había probado el néctar de las Grandes Ligas.

Su primera experiencia con los Mets había sido ya para quedarse hasta que llegó este problema que le costó que le practicaran dos cirugías, que generaron un proceso de recuperación extenso.

Hoy, con 24 años está de regreso a las Mayores y lo hace luego de promediar .515 (33-17), con tres jonrones y ocho remolcadas en nueve choques con el Syracuse, Triple A.

Esta brillante ofensiva llevó a los Mets a llamarlo debido a que Mark Vientos, infield tuvo una lesión en el hueso de la corva en el primer choque de la serie que Nueva York libra con los monarcas Dodgers. El estaría fuera por al menos 10 días.

El nativo de San Pedro de Macorís se unió al club anoche. Varios ejecutivos de los Mets habían expresado sus deseos de que en algún momento recibiera el llamado.

Mauricio estuvo en la alineación de los Mets bateando séptimo y jugando en la antesala.

Es un espigado ambidextro, capaz de accionar en la intermedia, antesala y el campocorto.

Durante su estadía en las Menores bateó varias pelotas sobre las 100 millas e incluso un doblete que salió a 117.3 millas por horas, una de las pelotas que más duro se ha bateado en la historia de la franquicia.

Aunque Vientos sale de acción, los Mets se mantienen resguardado entre la intermedia y antesala, con Brett Baty, LuisAngel Acuña y Jeff McNeil pudiéndose repartir los trabajos en ambas posiciones, con Francisco Lindor como jugador de cada día en el campocorto.

Será interesante lo que ocurrirá con Mauricio en estos días, pues de su desempeño estaría su permanencia en el equipo grande.