En el día de hoy, el personaje destacado es John Locke, uno de los pensadores más influyentes de la historia, con una trayectoria que dejó huellas profundas en el empirismo, la epistemología y la filosofía política. Nacido el 29 de agosto de 1632 y fallecido el 28 de octubre de 1704, Locke se convirtió en una figura clave de su tiempo, conocido como el «Padre del Liberalismo Clásico».
Filosofía y Contribuciones
Locke, filósofo y médico inglés, se posicionó como uno de los primeros empiristas británicos, influenciado por las ideas de Francis Bacon. Fue un defensor destacado de la teoría del contrato social y sus escritos tuvieron un impacto significativo en la Ilustración, marcando a figuras como Voltaire y Rousseau. Además, su influencia se extendió a los revolucionarios estadounidenses y se reflejó en documentos fundamentales como la Declaración de Independencia de los Estados Unidos y la Declaración de Derechos de 1689.
Una de las mayores aportaciones de Locke a la filosofía fue su teoría de la mente. Definió el yo como una continuidad de la conciencia y popularizó la idea de que, al nacer, la mente es una “tabula rasa” o pizarra en blanco. Rechazó la filosofía cartesiana basada en conceptos innatos, argumentando que el conocimiento surge únicamente de la experiencia sensorial y de la percepción.
Formación Académica y Carrera
Gracias a una beca, Locke estudió en la prestigiosa Christ Church de Oxford, aunque inicialmente se sintió decepcionado por el enfoque escolástico de los estudios. Esto lo llevó a explorar otras disciplinas como la química y la medicina, colaborando con figuras como Robert Boyle. Más adelante, descubrió la filosofía de Descartes, que tuvo una influencia decisiva en su pensamiento.
Locke también absorbió ideas de Pierre Gassendi, un crítico de Descartes, y de filósofos políticos británicos como Hobbes y Shaftesbury. Estas influencias moldearon su visión política liberal. En su vida, vivió en Londres, pasó cuatro años en Francia y tuvo un breve exilio en los Países Bajos antes de regresar a Londres tras la Revolución Gloriosa, donde se desempeñó como asesor del partido liberal whig.
Legado
Locke revolucionó la concepción del yo y de la identidad moderna, siendo una referencia para filósofos como Hume, Rousseau y Kant. Además, su filosofía política sentó las bases del republicanismo clásico y del pensamiento liberal que perduran hasta la actualidad.
Estas y otras informaciones fueron compartidas por el comunicador en el programa DEMOCRACIA TV.