La decisión del Gobierno de repatriar 10,000 migrantes haitianos en situación irregular en el país podría tener un impacto negativo en sectores productivos como la construcción, la agricultura, y otros, sin embargo, muchos gremios empresariales han optado por no emitir su opinión al respecto.

No es el caso de la Asociación de Promotores y Constructores de Viviendas del Cibao (Aprocivici), entidad que manifestó al Listín Diario, que el sector construcción afiliado a su gremio, apoya los esfuerzos del país para organizar la migración laboral hacia República Dominicana y se muestró partidario de un plan que permita seguir contando con personal regulado.

El presidente de Acoprovici, Sandy Rodríguez, indicó que el respeto a los derechos humanos debe primar en el proceso, y el orden, además del cuidado que debe tener el Gobierno para no paralizar el sector que garantiza la vivienda a las familias en República Dominicana.

Rodríguez destacó las buenas prácticas laborales del sector construcción y agregó que la migración laboral extranjera incide bastante en el sector agrícola, turismo y otras áreas.

Turismo no será afectado

En el sector turístico se ha notado en los últimos tiempos un incremento de trabajadores extranjeros, sobre todo de nacionalidad haitiana, tanto en la construcción de complejos hoteleros, como en algunas acciones de servicio.

No obstante, la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (Asonahores) aseguró que el proceso de repatriación de hatianos en condición irregular en el país no afectará al sector.

El presidente de Asonahores, David Llibre, manifestó que “hoy en día se contrata solo a colaboradores que se encuentren en un estatus laboral legal en el país, siempre manteniendo el ratio de 80% dominicanos y 20% extranjeros”.

Enfatizó que “estas acciones por parte de nuestro gobierno no tienen un impacto directo en nuestro sector”.

Sin vulnerar derechos

Para el director ejecutivo de la Asociación para el Desarrollo (APEDI), Saul Abreú, la repatriación anunciada por el Presidente Abinader es una reafirmación de la soberanía que tiene el país de establecer su política migratoria.

“Es un proceso demandado por muchos sectores que debe hacerse con cuidado para no vulnerar derechos humanos, evitando expatriar personas que están de manera regular e insertadas adecuadamente en el mercado laboral para no afectar actividades económicas que dependen de esa mano de obra”, explicó el líder santiaguero al Listín Diario.

Agregó que esta acción debe ser parte de una polìtica migratoria que encare de una vez por todas este fenómeno que tiene serias consecuencias para la economñia y la seguridad nacional.

10,000 por semana.

El Gobierno anunció a mediados de esta semana que repatriará unos 10,000 migrantes indocumentados cada semana.