A 10 días de producirse el siniestro incendio en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, en el municipio de Santo Domingo Norte, que cobro la vida de al menos 13 personas, la angustia se apodera de los familiares de los privados de libertad.
Decenas de familiares acudieron ayer, con la esperanza de encontrar alguna información acerca del traslado de sus parientes, así como también, para entregarles alimentos y objetos personales a los reclusos que permanecen en el recinto.
Es el caso de María Rodríguez, que expresó que no sabe del paradero de su hijo condenado a 20 años de prisión y quien ha cumplido 18 años de condena, piensa que fue trasladado a San Juan de la Maguana, pero no le han confirmado la información.
“Ayer me llamaron que se lo iban a llevar, yo le dije al amigo que le diera 500 pesos porque no tenía más. Yo soy una persona enferma, yo soy sola, nunca he ido por San Juan, esto es una situación caótica para mí, no es fácil”, sostuvo entre lágrimas.
Elvira Márquez dijo que no sabe si su hijo está muerto o sigue en la cárcel o lo han trasladado, ya que las autoridades han sido negligentes a la hora de informar sobre el paradero de los privados de libertad.
El hijo de Feliciana Guerrero fue trasladado a la cárcel del 15 de Azua, pero ella cuenta que no tiene los recursos para trasladarse a visitarlo. Además, agregó que su nieto aún permanece en La Victoria, pero teme que pueda ser reubicado.
“Yo pido que no me lo lleven lejos, ellos tienen que ver las condiciones mías y la de todas las madres que están aquí, porque nosotros tenemos que coger prestado y todo para venirlos a ver y traerle comida”, dijo desesperada.
En la Penitenciaría de La Victoria, obreros se encuentran trabajando donde ocurrió el conato de incendio, que afectó las celdas 3 y 4 del Patio del recinto, dejando en un estado crítico a un pabellón y reducido prácticamente a escombros.
Todavía siete cadáveres siguen sin ser identificados en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) del Cementerio Cristo Redentor. Además, miembros de la institución dijeron que por el momento los familiares no han ido a reclamar los cuerpos que quedan.
Ayer se realizaron el traslado de 150 reclusos a los centros 19 de Marzo en Azua, donde fueron llevados 50 y 100 a San Juan de la Maguana, para un total de 1,169 reos que han sido movilizados hacia 13 cárceles, según informó la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC).