Con tasas de crecimientos saludables y una relativa estabilidad de precios en la región se puede afirmar que en el presente año se estaría cerrando un nuevo ciclo de medidas diseñadas por los bancos centrales de la región para afrontar choques internacionales, particularmente los inducidos por el ciclo económico de Estados Unidos y por los precios del petróleo.
La afirmación es hecha por los analistas de Asesoría de la Gobernación del Banco Central en su foro Página Abierta sobre “Ciclos Económicos, Precios del Petróleo y la Política Monetaria en Centroamérica y la República Dominicana”.
En sus consideraciones finales, los analistas indican que toca a los bancos centrales de Centroamérica y República Dominicana normalizar sus políticas y enfocarlas en los problemas internos, aunque siempre dando seguimiento al entorno internacional.
“Una buena noticia para los bancos emisores de la región es que en las últimas semanas se percibe que está mas cerca un cambio de política en los países industrializados, lo que brindaría más espacios a las instituciones monetarias de la región para dinamizar sus economías”, refieren los economistas.
Indican que, el 26 de octubre pasado, Madame Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, anunció la primera pausa después de diez incrementos consecutivos de su tasa de política monetaria. Una semana después, tanto la FED como el Banco de Inglaterra decidieron mantener sus respectivas tasas de política monetaria invariables, en el primer caso en el rango de 5.25% y 5.50%, y en último, en 5.25%.
Destacan que la coincidencia de estas decisiones de política en el mundo industrializado apunta a que, de alguna manera, en estos países los bancos centrales se están convenciendo de que el problema inflacionario está siendo corregido y que se logrará un aterrizaje suave de la economía.
En su analisis refieren que “en definitiva, esto facilitará los procesos de normalización de las políticas monetarias en nuestra región allanando el camino a un nuevo ciclo de crecimiento sostenido y creación de empleos”.
Contexto
En este artículo publicado ayer por el Banco Central, donde se analizan los “Ciclos Económicos, Precios del Petróleo y la Política Monetaria en Centroamérica y la República Dominicana”, técnicos analizan la realidad económica de la región desde que República Dominicana forma parte del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) en 2013.
Sostiene que desde su incorporación al SICA, el país ha mantenido una posición de liderazgo, mostrando una economía dinámica con estabilidad de precios, creciendo a una tasa promedio de 5.3%, la más alta de la región.
Expone que a raíz de la pandemia del Covid-19, a distintos ritmos, los países iniciaron al cierre de 2020 y comienzos de 2021 los procesos de vacunación y reapertura de sus economías y que en la medida que estos procesos avanzaron se evidenció una recuperación sostenida de la economía de cada uno de los países a partir del primer trimestre de 2021.
Refiere que la recuperación tuvo sus consecuencias pues las políticas expansivas aumentaron la demanda de bienes y servicios y el reto principal fue detener la inflación con el menor costo posible sobre la incipiente recuperación. “Es así como República Dominicana y Costa Rica se convirtieron en los primeros países en anunciar el retiro del estímulo monetario a fines de 2021”.
Al cierre de 2022, apuntan los analistas, algunas economías de CARD ya presentaban una recuperación completa con respecto a los niveles prepandemia y la economía de mayor crecimiento era República Dominicana (4.9%), seguida por Costa Rica (4.3%).
Aseguran que las medidas adoptadas para combatir la inflación permitieron controlar las alzas de precios y que, en el caso dominicano, la inflación entró al rango meta de 4.0% ± 1.0% en mayo de 2023 y continuó su tendencia a la baja hasta situarse en 4.41% en septiembre.
De acuerdo con lo planteado por los analistas del Banco Central con las economías creciendo y la inflación controlada, se fueron creando las condiciones para una normalización de la política monetaria y, los primeros bancos centrales en reducir sus tasas de política monetaria en 2023 fueron República Dominicana y Costa Rica.
“La reducción de la TPM en el país ha sido de 125 puntos básicos, de 8.50% en mayo a 7.25% en la actualidad. Esta medida y la adopción de un programa de provisión de liquidez para acelerar la transmisión monetaria deberá contribuir, junto a la dinamización de la inversión pública, a que el crecimiento retorne a su potencial en 2024 en un entorno de estabilidad de precios”.
Agregan que el FMI proyecta que para el próximo año, República Dominicana será la economía de mayor crecimiento en la región, 5.2%, seguida por Panamá 4.0% y Guatemala 3.5%.