Santo Domingo.- El canciller Roberto Álvarez anunció este martes la entrada histórica de República Dominicana en el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la Organización de las Naciones Unidas para el período 2024-2026, luego de ganar su candidatura en las elecciones de la Asamblea General, al alcanzar 137 votos de 186 papeletas válidas.
El ministro Álvarez afirmó que la obtención de un asiento en este Consejo “constituye un hito para el país y reafirma el compromiso del Gobierno dominicano con la promoción, protección, defensa y cumplimiento de los derechos humanos a nivel global, como lo contempla la política exterior nacional en su eje número tres”.
Agregó que esta posición es un reconocimiento de la comunidad internacional a la política exterior dominicana y además fortalece el liderazgo del país, ya que el Consejo de Derechos Humanos constituye uno de los principales órganos del Sistema de las Naciones Unidas, el cual está compuesto por 47 Estados.
El canciller Roberto Álvarez ponderó que este triunfo de República Dominicana responde a las nuevas directrices en política internacional aplicadas por el gobierno del presidente Luis Abinader. Igualmente resaltó el arduo trabajo realizado por los funcionarios de la Cancillería y el servicio exterior dominicano; el viceministro de Política Exterior Multilateral, Rubén Silié; y las misiones permanentes ante las Naciones Unidas encabezadas por los embajadores José Blanco, en Nueva York, y Virgilio Alcántara, en Ginebra, Suiza, además de las direcciones de Organismos Internacionales y Derechos Humanos del MIREX.
El ministro aprovechó su presencia en estas votaciones para agradecer a los países que apoyaron la candidatura dominicana y además felicitó a las otras naciones electas.
Por el Grupo de Países de América Latina y el Caribe (Grulac), además de República Dominicana, fueron electos al CDH Cuba y Brasil para cubrir las tres vacantes disponibles en la región para ese período.
La función principal de este Consejo, que tiene sede en las oficinas de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza, radica en fortalecer la promoción y protección de los derechos humanos y abordar situaciones en las que se vulneran los derechos fundamentales, a partir de las cuales se formulan las recomendaciones pertinentes a los países para restituirlos, repararlos y/o establecer las sanciones pertinentes en los casos que la ameriten.